ENCADENADA A UNA PASIÓN

Un hombre no necesita de mi devoción, pero la tiene de todos modos, a veces le cedo el poder de poseerme incluso más del que tengo.

A veces chateas en lugares sin censura y sin darte cuenta te encuentras ante un extraño realizando ciber-sexo.

Si, curioso, pero es así, te ordena que te quites la ropa, y tu le ordenas a él. Os voy a relatar una historia sobre ello.

Arnold entro en su privado, después de unas presentaciones en el Chat , de hablar un largo rato, sin darse cuenta Alice se encontraba hablando de sexo con un extraño. Aquel hombre noto a través del pc que aquella mujer se había puesto cachonda, sin miramientos la pregunto, si deseaba hacer Ciber-sexo con él aquella noche.

Ella sin pensárselo mucho le dijo que si, “ era su primera vez y la curiosidad picaba”.

Pon la Cám., será más real y podemos jugar mejor, dijo Arnold.

Alice accedió.

Desnúdate ante mi nena, despacio, que vea como te vas quitando la ropa, ve tocándote, acaríciate los pezones, chúpate el dedo, tócate el coño, quiero verlo de cerca.

Él se encontraba totalmente desnudo, con su tranca bien tiesa, pajeándosela, sin dejar de mirar en la pantalla el cuerpo de Alice .

Alice se sentó en la silla de su cuarto, abrió su coño para él , colocando la Cám, muy cerca , para que no perdiera detalle, mientras jugaba con su clítoris, sus dedos se introducían a modo de polla en su vagina húmeda, gemía, “ se imaginaba que era la lengua de su ciber-amigo, que la poseía”, sus pechos estaban duros, muy excitados, “aquella excitación extraña la hacían sentirse como una puta” y eso la gustaba.

Arnold, seguía pajeándose, poco más podía hacer, mientras sus ojos no dejaban de mirar el coño de Alice.

La excitación era máxima, el ritmo de los dedos de ella, cogían velocidad, a la vez que se introducían hacia el fondo de su coño, sus piernas muy abiertas dejaban claro que la humedad, el calor de aquel túnel eran evidentes.

Él , no tardo mucho en dejar salir su semen, un grito acompañado de un gemido delato la presencia del liquido deseado.

Ella, estaba a punto de explotar, Arnold puso el zoom para poder ver con detenimiento la corrida y aquel liquido sagrado como salía por su coño, chorreaba entre sus dedos, los cuales se los lamió y relamió delante de la Cám.

Aquella experiencia demostró a Alice una cosa, que no hay nada como el sexo con calor, y que un pc no deja de ser una paja con invitado de honor.

Encadenada a la pasión que me provoca el hombre, sexualmente lo necesito, pero no solo se trata de sexo, eso es fácil de dar, se trata de algo más superior, intimo, único, solo unos pocos son capaces de darlo, y eso busco……………… sin encontrarlo

BUENAS NOCHES bell@s