Una frase corta que nada tiene que ver con este relato…¿O si?...
Agosto 2010, 8 de la mañana, sonó mi móvil, era él.
Belle, te vienes a navegar?... He aprobado el carnet de patrón y me encantaría celebrarlo contigo. He alquilado un precioso velero para la ocasión por dos días, estoy en el puerto de Areyns de Mar, muelle 5.
No me lo pensé dos veces, me encanta el mar, bucear y salir a navegar, y si es con él mejor.
Lo dispuse todo en casa y en el trabajo; Metí en el maletero de mi coche mis artilugios de buceo, cuatro trapos y para Areyns.
Estacioné mi vehículo en el parking del puerto, y enseguida le divisé. Pantalón corto gris claro, torso al descubierto dejando ver su morena piel, su pectoral depilado, su pelo rubio, más claro de lo habitual por el sol, y esos ojos verdes que tan enamorada me tienen.
Me vio enseguida.
Hola cielo, te esperaba con ansia, ¿que guapa estas?...
Ya sabía que me lo diría, por eso me puse aquel vestido blanco semitransparente, mini faldero que tanto le gusta, pelo suelo y un ligero toque de mi perfume Bulgari rose.
Besos, abrazos, me acomode en el velero, mientras el ponía rumbo a alta mar.
Qué guapo esta al timón!!…
Me desnudé del todo, y me dispuse a tomar el sol ante él. Abrí mis piernas deliberadamente, dejando entre ver mi coño recién depilado estilo brasileño, pude observar una tremenda elevación de su cipote, se puso bien morcillón, mi coño empezó a humedecerse, buscando el jugo de la pasión.
Paro el barco, tiro el ancla, y sin mediar palabra se acercó a mí. Su lengua jugó con la mía, besándome suavemente como a mí me gusta, nos besamos largo rato, pasando de la pasión a la suavidad y vuelta a empezar.
Me fascinan estos encuentros calenturientos, donde el escenario no se limita a una cama o el coche.
Mientras me besaba en el cuello, “parte débil de mi” le susurre al oído, hasta donde podía llegar sexualmente, Donde tiene su límite, suspiro, y su lengua alcanzo mi clítoris, nunca había visto a un hombre mirar un coño así, proyectaba una avidez inocente y perpleja, cubierta de obscena lujuria, y deseo.
Me miro a los ojos, e introdujo su tranca en mi buzón, en mi raja, follándoselo intensamente, como a mí más me gusta, su polla me penetró hasta el fondo, la presión me hizo estremecer.
Me volteo y me enculó. Solo mi culo es de aquellos dioses merecedores de mi alma.
Movimientos lentos, elegantes, cuidadosos, el contacto muy pleno y poco doloroso. Sentir su polla dentro de mí, en ese viaje imposible dentro de mi culo, es indescriptible.
Dejarse follar por el culo es la forma más extrema de rebeldía, y yo siempre he sido una rebelde sin causa.
La mayoría de los hombres follan de una manera ritual, entrando y saliendo y replay..
Pero él mi dios, folla como si fuera alguna parte, como a mí me gusta que me follen.
Su polla penetra cada vez más, hacia el fondo de mi ser, de mi culo, encharcado entre mis fluidos vaginales y el deseo de ambos.
Podía notar sus huevos en mis nalgas, sentir toda su tranca en las paredes de mi culo, sentir su punta tocar mis entrañas, presiona ligeramente, respiro, empuja, me relajo, palpita, me abro, empuja, me abro, arremete, nos miramos a los ojos , ya me tiene apunto.
Se retira e inicia embestidas cortas en la entrada durante unos segundos, se adentra en el túnel de mi culo, despacio, lento, muy lento hasta que su polla queda hundida totalmente en mi trasero, con todo el tallo dentro, quedando solo los huevos fuera.
Permanecí unos segundos inmóvil, después rítmicas sacudidas me penetra un poco más, siento crecer su polla, mi ansiedad es enorme, deseo correrme, mi vanidad crece, como una aspiradora su polla absorbe mis yo interior, elimina mis pecados sexuales, mi bondad, mi inocencia, me siento explotar, me corro….
Follada hasta sentirme exhausta…..
Saca su polla, la dirige hacia mi boca, y
deja emanar su semen por mi rostro, lo bebo, lo absorbo, lo disfruto…..
Dedicado a mi caballero andante... como lo solia llamar.....
Un bonito recuerdo........Que he querido compartir con todos vosotros..
Belle avigon..